Aprenda todo sobre la oración de la noche salmo 4, una plegaria para dormir

Oración de la noche salmo 4 es a la que recurren todos los cristianos en situaciones de angustia, buscando consuelo y descanso al alma para dormir con tranquilidad. Con esta oración se pide a Dios reafirmar la fe, la confianza y procure un sueño reparador.

¿Qué es la oración de la noche el salmo 4?

Es la oración que los devotos cristianos elevan hacia Dios pidiéndole apoyo, sosiego y descanso para el alma y el cuerpo. Se emplea mayormente en circunstancias de desconsuelo y vacío espiritual. Mediante este salmo se solicita al Santo Padre esperanza y fe en momentos en los que la persona se siente desvalida y casi sin fuerzas para seguir adelante.

Como bien se ha señalado por muchos, el salmo 4 constituye una oración vespertina o nocturna que hace el Rey David, en la que invoca al Dios de justicia.

En ciertas ocasiones se usa para demostrar a aquellos que son incrédulos, los frutos que ofrece el Señor a sus hijos fieles a su Palabra y su apoyo para salir de la oscuridad a través de este salmo.

Mediante esta oración es posible ahuyentar las energías negativas de las personas que se dejan guiar por el mal, ya que el salmo llena de paz y alegrías y protege en esas situaciones de flaquezas y debilidad.

El salmo nos muestra las recompensas que pueden recibir los hijos de Dios al profesar y fortalecer todos los días la fe en su mensaje y en sus enseñanzas. Esos privilegios y gozos solo lo pueden recibir quienes oren con verdadero fervor a Dios, se mantengan firmes en la fe y no se dejen desviar del camino hacia Él.

Como sabemos, el salmo 4 forma parte del Libro de los Salmos, el cual es un conjunto de cinco libros de poesía religiosa del Antiguo Testamento.

Se le incluye dentro los llamados Libros Sapienciales e incluye una serie de alabanzas y peticiones al Mesías para lograr su divina intercesión y salvación.

Por tradición se ha señalado que el salmo fue escrito por el Rey David, quien era el elegido de Dios. Éste fue un rey israelita, segundo gran gobernante legítimo del Reino de Israel, el cual consiguió la unificación del territorio israelita y su expansión. Es venerado como rey y profeta tanto de judaísmo, como del cristianismo y el islam.

En el salmo el Rey David le habla a los pecadores en su camino a encontrarse con Absalón, su tercer hijo. El mensaje que transmite David en esta oración es que el triunfo que se obtiene como pecador no es duradero, no tiene sentido y que el arrepentirse de los pecados produce verdadera felicidad.

Le hace un exhorto a Dios para que libere al hombre de las penurias del pasado y con justicia le dé el descanso a sus penas.

En la religión judía se utiliza el versículo 5 del salmo como parte de las oraciones a la hora de acostarse, así como el versículo 7 se usa como oración por el sustento en los días festivos.

Dentro de la fe católica y ortodoxa se eligió este salmo hacia el año 530 d. C. para rezarlo al comienzo como primero del oficio de maitines; es decir, en la hora más temprana para servir como rezo para la liturgia de las horas canónicas.

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Análisis de la oración por versículos

A este salmo se le titula la Exhortación A Los Adversarios, pues hace referencia, como ya se señaló, a la petición que hace el Rey David a los pecadores a que se arrepientan para tener una verdadera victoria y se libren de las angustias y pidan justicia al Santo Padre.

Veamos lo que cada uno de los versículos de este salmo significa.

Salmo 4:1 “Respóndeme cuando clamo, oh Dios de mi justicia. Cuando estaba en angustia, tú me hiciste ensanchar; Ten misericordia de mí, y oye mi oración.”

Este versículo hace referencia a lo que Dios les dice a los enemigos para que tengan justicia y misericordia. Les exhorta a los enemigos que desistan de la maldad y den apoyo y alivio a las penurias y que sigan a Dios que es justo.

Salmo 4:2 “Hijos de los hombres, ¿hasta cuándo volveréis mi honra en infamia, Amaréis la vanidad, y buscaréis la mentira?”

Se increpa a los pecadores e incrédulos a que respeten su honra, a que no tengan vanidad ni busquen esconderse tras la mentira.

Salmo 4:3 “Sabed, pues, que Jehová ha escogido al piadoso para sí; Jehová oirá cuando yo a él clamare.”

Sabiendo David que Dios respondería a sus plegarias, les dice a los piadosos fieles que también escuchen y pidan a Dios, que también los oirá y los salvará, porque los ha perdonado. Es una aseveración de que Dios escucha y responde, aun cuando no sea la respuesta que se espera.

También Dios nos escucha y nos responde cuando lo llamamos en plegaria para pedir perdón por nuestros males, por lo que debemos confiar en Cristo y no desfallecer, porque pensamos que hemos caído y hemos desobedecido sus preceptos. Dios igual nos tiende su mano.

Salmo 4:4 “Temblad, y no pequéis; Meditad en vuestro corazón estando en vuestra cama, y callad.”

En este versículo se pide no caer en el pecado, no ir contra los designios de Dios agobiados por las angustias y mantener la confianza en el Creador que Él dará paz que se implora.

Salmo 4:5 “Ofreced sacrificios de justicia, Y confiad en Jehová.”

En los tiempos del Antiguo Testamento se hacían sacrificios de animales como muestra de adoración para saldar los pecados cometidos. Pero para Dios eso no era relevante, lo importante era la actitud de arrepentimiento del pecador, su obediencia y sumisión.

Esa es la misma actitud que debemos profesar hoy al Santo Padre: obedecerlo y alabarlo. Esa es la mayor ofrenda que se le puede dar y que Él recibe con el mayor beneplácito. Esto es lo que se nos expresa el salmo en este versículo.

Salmo 4:6 “Muchos son los que dicen: ¿Quién nos mostrará el bien? Alza sobre nosotros, oh Jehová, la luz de tu rostro.”

El salmo pide con pasión que el Dios Todopoderoso nos mire y nos muestre el camino del bien hacia su gloria.

Salmo 4:7 “Tú diste alegría a mi corazón Mayor que la de ellos cuando abundaba su grano y su mosto.”

La gloria de Dios es la que nos fortalece y nos da satisfacción, lo cual es más valioso que lo que nos pueda dar cualquier otro logro material.

Gracias a la alegría que nos proviene del conocer y confiar en Dios, ello nos llena de felicidad nuestro interior. Es un gozo estable que se sustenta en la confianza en el Padre Santo y ello derrota el desaliento con una alegría duradera.

Salmo 4:8

“En paz me acostaré, y asimismo dormiré; Porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado”.

Nos ofrece el salmo en este pasaje la paz y el descanso que requiere nuestro ser en momentos de tribulación. Es el sosiego y el consuelo que se requiere al caer el día para luego proceder al dormir con un sueño reparador de las fuerzas para seguir adelante.

Gracias a la inspiración que se alcanza a elevar esta plegaria del versículo, conseguimos conciliar el sueño que nos reconfortará y que nos dará los bríos que requerimos para continuar la rutina del día a día.

Dios, mediante las palabras que nos dirige en este versículo 8, nos llena de serenidad, sosiego y, de alguna manera, de control a pesar de las tribulaciones, con lo cual nos lleva a conseguir dormir en paz y reconfortados por la Palabra del Señor.

Este versículo es el recomendado a tener siempre presente al momento de irnos a dormir y rezar con fervor y confianza de que Dios nos escucha y nos da el sueño que requerimos y nos cubrirá con su manto protector mientras dormimos.

Confiemos en Él, quien en su infinita bondad nos regocija y nos llena de su gran amor de padre hacia su hijo desvalido y agotado.

Permitámosle que inunde de fe y amor para por su infinita misericordia lleguemos al descanso merecido después de una faena agotadora.

Algunas acotaciones

Como ya sabemos, el salmo 4 es la oración  que nos invita a la reflexión, al cambio de actitud y pedir el descanso reparador en el sueño. No obstante, hay ciertas acotaciones que señalar:

• Los versículos 3 al 5 exhortan a los adversarios y pecadores a cambiar su actitud y confiar en Jehová. Nunca se pide venganza contra ellos, ni se les insulta, solo se quiere que modifiquen su actitud hacia el Creador.
• El versículo 5, además, señala que se deben ofrecer sacrificios de justicia. De tal manera que se debe aceptar la redención de Dios con un corazón arrepentido y humillado.
• Se indican las malas obras, engaños y manipulaciones de las que se valen los malos y adversarios.

Se hace también una diferenciación en cuanto a la vida que proclama Dios, quien escucha y socorre al hombre en todas sus angustias.

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• David pide a sus adversarios reflexionar sobre su actuar, les pide honor a Dios y que abandonen su vida pecaminosa. Así como se exhorta que se debe temer a Jehová y que el momento de silencio y soledad en la cama es el propicio para hacerlo, tal como lo dijo Jehová en sus prédicas.

  

• Por su parte, el versículo 6 presenta otra diferencia entre los que buscan la prosperidad material y los que claman una comunión más estrecha a Dios.
• En cuanto al versículo 7 ahonda sobre esa misma diferencia, destacando en él la alegría que produce la comunión con Dios, en contraste con el gozo efímero de la abundancia material.

Se desprende de allí que Dios es el que proporciona los bienes materiales para disfrutarlos, pero que éstos no deben ser el fin último de la vida.

• La angustia fue el motivo del salmo, pero a su vez es el que proporciona la paz cuando señala que “me acostaré y enseguida dormiré“. Ello refleja la plena confianza de que Dios cuida y guía a sus fieles.
• Así también, la angustia motivó el salmo, pero ello condujo a que la fe aumentara y trajera la paz.

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Beneficios

El salmo 4 presenta algunos beneficios a considerar para tratar de lograr el consuelo deseado y conciliación del sueño requerido para alcanzar la serenidad del alma. Estos aspectos son:

• Muestra lo bueno y satisfactorio que es el camino del señor.

  

• Protege de las malas vibraciones de personas tóxicas.
• Da consuelo en los momentos de oscuridad y duda.
• Infunde la necesaria confianza en Dios y en la persona misma.
• Bendice el ser.
• Da la fuerza requerida para enfrentar a los falsos dioses y reyes.
• Orienta sobre lo que hay que hacer en situaciones en las que se debe tomar decisiones.

Importante señalar que este salmo nos enseña que:

• Al igual que David reconoció sus angustias ante Dios y clamó justicia, nosotros también podemos en situaciones de pesar acudir al Dios Padre a través del salmo, humillarnos e implorar su justicia de manera de obtener su perdón, su paz y tranquilidad.

  

• Se debe reclamar al hombre incrédulo que no reconoce a Dios, y le exhorta a meditar en Dios, a que se aleje del pecado, sea justo y confíe en Él.
• Se requiere dar testimonio de la misericordia de Dios, de su bondad y grandeza, así como de la transformación que Dios ha hecho en su vida.
• Es importante expresar la absoluta confianza en Dios y aguardar que Él nos dará el descanso y paz solicitados.
• Al sentir los pecados que resuenan en la consciencia, al tener ese sentimiento de culpa por el mal hecho en la vida, es posible refugiase en este salmo.

Esta oración llena de luz el alma y lleva a reflexionar sobre lo hecho.

• El Santo Padre ayuda a sentirse mejor al afligido y a vencer ese pesar que lo agobia y le impide ver su luz. Esa luz solo se alcanza con las oraciones dedicadas al Señor Dios.
• Dios nos atiende, perdona las fallas, nos resguarda y sana por completo, pues al invocarlo se está haciendo la petición al mismo todopoderoso.

Como bien se puede deducir, Dios a través de este salmo 4 nos recuerda que no debemos seguir ni ser persuadidos para adorar a reyes y dioses falsos. Sólo el Santo Padre es la única ruta a la gloria, a la verdad.

Se trata, tal como se ha podido constatar, de una poderosa oración con la cual podemos reafirmar la fe para con Dios, quien vela por la vida de sus fieles creyentes, se mantiene atentos al llamado de auxilio y consuelo de sus hijos y brinda la paz espiritual que ellos claman.

El salmo 4 muestra los beneficios del sendero que él mismo ofrece para seguir y que se trata del camino auténtico para llegar a la paz y la tranquilidad para poder descansar.